Bueno, sí, hace mucho que no escribo pero de todas formas ¿qué mas da? Tampoco ha pasado nada interesante en mi vida hasta las últimas dos semanas. Resulta que la norma en este país (para los extranjeros que viven aquí también) es hacer las internships ( becariado, para entendernos) al terminar el segundo año de carrera. Para los que hacemos algo tan común como económicas, y que queremos trabajar en algo tan común como finanzas, no nos queda otra opción que ponernos a los pies de los Bancos de Inversión y las multinacionales, a ver si nos admiten como esclavos de verano. Y para quitarse competición, lo mejor es pedir plaza cuanto antes, cosa que yo empecé en septiembre y ya va dando sus resultados.
Los procesos de admisión de estas compañías son tan enrevesados que ni ellos mismos los entienden, pero constan generalmente de las siguientes partes:
1.- Una solicitud de plaza
online, en la que generalmente hay un currículum y un
cover letter en plan diciendo por qué quieres trabajar aquí y quién eres, y además unas cuantas redacciones sobre los temas más variados. La eterna duda entre los que voluntariamente nos sometemos al peor proceso burocrático desde hacerse el pasaporte es si realmente alguien se está leyendo toda esta bazofia que escribimos. ¿De verdad, señor banquero (o peor,
señor de recursos humanos) le interesa lo que un estudiante de económicas con ínfulas de
Gordon Gekko tenga que decir sobre los mercados emergentes africanos? Lo dudo mucho, pero no se puede solicitar plaza sin escribirlo todo, así que sacamos desde lo más profundo de la cabeza nuestras mejores tonterías y allí las ponemos.
2.- Los pocos afortunados que superen (por lo que sospecho, una cosa completamente aleatoria) la solicitud de plaza inicial serán invitados a una entrevista telefónica. En ésta se le puede preguntar a la pobre cobaya cualquier cosa que se le pase al entrevistados por la cabeza (Del estilo de: "¿qué te motiva a levantarte cada mañana?"), que dejarán al pobre entrevistado con un no se qué que queda balbuciendo, y cara de atontado.
De las tres compañías en las que yo he pedido plaza, dos me han invitado a una entrevista telefónica. Una de ellas era
Shell, y la otra
Standard Bank of South Africa (que por cierto es un pedazo de banco, aunque no os suene de nada); la de Standard Bank la he terminado hace veinte minutos. Tú les das tu teléfono y ellos te dan una cita y te llaman a esa hora, el de Shell me llamó desde Holanda y la de SB desde Londres. Aunque por algún extraño motivo la de SB me llamó al móvil, aunque yo no recuerdo habérselo dado. En fin...
La de Shell fue la primera, y por lo tanto la peor porque no sabía qué esperar. Aunque me preparé muy bien con la ayuda de algún que otro banquero de la City, no sabes que va a ser hasta que no estás allí hablando con el tío. Shell tenía que llamarme un martes a las 830 de la mañana. Me levanto un par de horas antes, me preparo muy bien las posibles preguntas que me pueden hacer, me pongo de punta en blanco (al parecer, se nota todo; por si acaso yo me puse chaqueta y corbata) y en el momento más inesperado suena el teléfono. Es él. Llama de Shell. Se llama algo ininteligible y me dice que ha perdido mi CV y que si puede llamarme el viernes. Por supuesto, si me puede dar sus detalles yo estaré encantado de mandárselo. Cuelgo y se lo mando. Ok, recibido, gracias, hablamos el viernes. Vaya, hombre.
Así que el viernes suena el teléfono de nuevo, yo ya levantado desde hace un par de horas y con una lata de Redbull entre pecho y espalda. Hola Olav, qué bueno hablar con usted otra vez. El tal Olav me cuenta que la entrevista durará unos 45 minutos y que sólo hay tres preguntas: Cuál ha sido mi mayor logro en la vida, Describir una situación en la que haya trabajado en grupo y finalmente un caso práctico. Así que allá voy yo explayando mi vida y milagros al pobre señor, que si violín, que si bachillerato internacional, que si se me dan bien las mates (por cierto, no lo he dicho, el papel para el que estaba entrevistando en Shell es una cosa muy interesante que se llama Commodity Trading). Hasta que llegamos al caso práctico. Me da a elegir entre cuatro opciones, y yo elijo "La importancia de los programas de desarrollo social en lso terrenos de extracción más desfavorecidos". Yo pensaba que a continuación me iba a contar un rollo muy largo sobre el tema, pero en lugar de ello va y me suelta: "Bueno, cuáles son tus opiniones sobre el tema?". Genial. El tío espera que yo le suelte aquí un discurso sobre un tema que no conozco. Piensa, Bosco, piensa. Así que rápidamente tomo unas notas y le voy soltando lo primero que se me pasa por la cabeza: importancia de crear trabajo, escolarización, incorporación de la población autóctona a la plantilla de trabajo, etc. Lanzándome a veces un poco a la aventura, por ejemplo, diciendo que "Los puntos más importantes son tres", cuando sólo has pensado uno y tienes que ir pensando los otros dos mientras le cuentas a Olav el primero. No puedo decir si lo hice bien o mal, sñolo que en vez de 45 minutos estuvimos hablando una hora y que todavía no me han dicho nada (pero en la página web sigue diciendo que estoy "seleccionado"). Todavía me queda por saber si pasaré al paso 3.
Los de Standard Bank me han llamado hoy. Yo (como imagino que vosotros tampoco) no sabía nada de ellos hasta que me fui con mi bici a la feria del empleo de Imperial College London (porque quería hablar con los de Shell, no por otra cosa) y me acerqué porque estaban repartiendo unos termos de café muy chulos. Como hubiera sido desconsiderado no hablar un poco con la señorita después de coger un termo (y además era guapa), me puse a preguntarles que qué hacían y tal. Resulta que son el banco más grande de Sudáfrica, y que están presentes en más de 30 países. Pero lo que más me gustó de ellos es que se centran en las finanzas de los mercados emergentes: Brasil, Uganda, India... por eso no oímos hablar de ellos, pero de verdad que son muy grandes y el trabajo que hacen me pareció muy motivante así que también pedí plaza en sus becas de verano. Cuando me he dado cuenta de que me estaban llamando al móvil en vez de al fijo, y he logrado articular un "buenos dí-- tardes, soy Bosco" me he encontrado con una señorita muy simpática que me ha hecho unas cuantas preguntas, típicas tópicas de entrevista, estilo: "¿Qué te haría destacar entre los demás becarios?", "¿Cuáles son los pasos que has tomado para desarrollar tu carrera en banca de Inversión?" "¿Porqué Banca de inversión, y porqué en Standard bank?" "Pon un ejemplo en el que hayas desarrollado tus habilidades comunicativas" "¿Cuáles son los beneficios que esperas obtener de trabajar con nosotros?" "¿Qué te motiva a conseguir tus metas bajo presión?" "¿Qué tres adjetivos utilizarían tus amigos para describirte?" o "Excluyendo las técnicas, ¿qué habilidades esperas desarrollar trabajando con nosotros?". La gan mayoría de éstas me las tenía preparadas, otras me pillaron un poco desprevenido, pero creo que al final lo hice bien. Ahora también a esperar a que me comuniquen si paso al paso tres.
3.- Assesment Centre (Centro de evaluación). De aquí no puedo hablar mucho ya que no he llegado todavía, pero si Dios quiere lo haré. Se trata de (Al más puro estilo "
El método") reunir a los que han pasado los dos primeros pasos (no deberían ser más de 15) en una oficina o en un hotel durante un par de días, y encerrarlos con unos cuantos banqueros que les harán pasar por todo tipo de pruebas inimaginables. Lo bien que se lo tienen que pasar los banqueros estos días... viviendo 24 horas con unos tíos pudiendo hacerles creer que cualquier cosa que digan, o incluso hasta la frecuencia con la que van al baño puede afectar su contratación. Si llego a esta etapa, lo documentaré todo, no os preocupéis.
4.- Este es ya el último paso: obtener el trabajo y hacerlo bien durante los tres meses que te toca estar pringando. Si lo haces bien y les caes bien, seguramente te llamarán para otra beca el año que viene, y si ésta también la haces bien te contratarán como esclavo oficial a tiempo completo.
Así que sí, a eso es a lo que aspiramos algunos... una vez escrito parece una locura, pero el mundo laboral está un poco perjudicado después de lo mal que lo han hecho los que queremos que sean nuestros predecesores. Espero que esto último tenga sentido, en mi cabeza lo tiene. por lo demás, señores y señoritas de Madrid que lean esto, vengan, vengan a trabajar por aquí! me ofrezco a ayudar en lo que pueda en los horribles procesos al que se atreva a intentarlo.
¡Salud!